Cenizas del Deseo

 

  Deseo. Puro, simple, inalterable. Hay cosas que no se pueden fingir. Probablemente, este sentimiento, sea una de ellas. Y ahora, mientras me miras, mientras me hueles, mientras me tocas… Ahora no finjo. Soy tuya, tú me tienes alterada, tú me tienes ardiente entre las manos viriles. Ahora, que sé quién …

Seguir leyendo

¡Atame!

 

 Gemí… gemí y jadeo. Por dos motivos… Uno es que estaba excitada. Sin duda alguna, me tenías la entrepierna completamente mojada. Los labios de la vulva estaban hinchados y enrojecidos, y eso que apenas si habías tenido tiempo de centrarte en ellos… Aun… El otro motivo, que habías tenido que …

Seguir leyendo

El saber estar…

 

 Mi cara de sorpresa con tu respuesta, tus ojos ilusionados a la espera de la mía. Un guiño, una sonrisa, un asentimiento. Un compromiso… tu regalo. Decididamente organizar toda esta parafernalia para ofrecerte lo que quieras pedirme por tu onomástica tal vez me fuera a salir tremendamente caro. Una caída …

Seguir leyendo

Mi porteño

 

 Mírame a los ojos y quémate en sus llamas. Estoy prendida de deseo, encelada. Estoy llena y vacía. Liviana. Loca y cuerda… Pero sobre todo… excitada… Mira como cruzo las piernas. Desea tocarlas; allí quiero tus manos, allí necesito tus dedos, en la unión de los muslos con las nalgas, …

Seguir leyendo