Estoy asustada… No sé decir adios. Lo reconozco. Te miro, tumbado en la cama, y pienso que esta es la última vez que te beso. Y la última vez que pruebo tu piel… He decidido dejarte. Duermes plácidamente tras el orgasmo. Me diste de beber, como tantas veces antes. Me atraganté con el hambre que llevaba de ti… y al …