Segundo escalón Pocas veces había sentido miedo. No hablo de un miedo irracional a las cucarachas, o a suspender un examen. Hablo, de verdad, de ese miedo que te paraliza y no te deja seguir avanzando, tanto física como emocionalmente. Me refiero a una pérdida de la capacidad de respirar, o que simplemente esos movimientos respiratorios duelan tanto que no …