Perdona, ¡por Dios! Perdona… Fui estúpida; lo sé, y lo siento. No sé cómo me dejé llevar, no sé cómo se me ocurrió hacerlo… ni cómo me atreví. Es verdad, lo confieso. Hacía tiempo que lo deseaba… Mirarlo era en sí ya pecado, y continué observando. Pero nunca debí pasar esa línea que quise trazarme, cuando aún me importaba algo …
Perdón…
Hoy me siento débil, perdida, confusa. Hoy mi cuerpo no es el mío. Desmadejado, dolorido y resentido… Imagino el tuyo, impotente ante mi recuerdo; mi alma te ha hecho daño… por suerte mi cuerpo no la ha seguido. Aun así duele. A mí también me quema por dentro. Sufro porque conozco el sabor de tu piel y lo anhelo. Porque …