– No. Estoy segura de que quieres conocer mi mayor fantasía. Pero… Insistes, tumbado a mi lado en el sofá de tu casa, como si no hubiera nada más interesante en ese instante sobre lo que conversar. Un tema escabroso, sin duda, para amenizar la tarde de domingo con las tazas de café humeando en la mesilla. Y tremendamente excitante …
Venganza
La mente se me llena de venganza. Y la boca… Y aquí me tienes, indecisa. Hijo de puta, ¡me has convertido en algo que nunca pensé llegar a ser! Indecisa no es la palabra… ciertamente. Tentada a seguir, reticente apenas. No es indecisión. Soy la putilla que quisiste sacar de mis entrañas, y ahora no sabe si pasar a mayores. …