7 de Septiembre de 2008

Bea Aunque sea su hermano... Comenta

Esto va de mal en peor. Yo pensaba que el inicio de las clases haría que al pasar más tiempo fuera de casa la cosa se relajara pero no va a ser el caso. Mi madre ha empezado también a trabajar en una panadería y ahora cuando llega a casa está tan cansada que lo único que quiere es silencio.

Ya no puedo ni hablar en la mesa.

También ha sido el primer día en la facultad para Víctor. Parece que no ha ido muy bien porque ha llegado de muy mal humor a casa. No lo ha dicho en voz alta, pero se le notaba que tenía ganas de mandar todo un poco a la porra –incluso la comida de mi madre, y mira que suele decir que está buena-. La verdad es que hoy me ha dado un poco de pena. Lo he escuchado llamar a sus padres por la noche, tras la cena, metido en su cuarto. Nunca cierra del todo la puerta y como su habitación está justo pegada a la mía he podido oírle decir que no estaba seguro de no haberse equivocado al elegir la carrera.

Me ha dado bastante pena, la verdad.

Tiene que ser horrible haber tenido que dejar atrás todo lo que conoces para seguir un sueño, y que al final el sueño parezca no merecer la pena. Reconozco que no he ayudado mucho a que se sienta como en casa, y supongo que lo necesita ya que ahora ésta va a ser en verdad la suya. Creo que a mi madre le encantaría que nos lleváramos bien, y más sabiendo que va a pasar más tiempo fuera de casa. Me ha dicho que tiene que estar en la panadería a las cinco de la mañana. Mi padre comentó un día que a esa hora no estaban ni puestas las calles en su sitio y que mi madre no tendría forma de llegar hasta la panadería.

Pero, al parecer, nos hace falta el dinero.

Por lo que he podido entender el hecho de alimentar ahora una boca más hace que mi madre tenga que trabajar. No han querido reconocerles a los padres de Víctor que les viene muy mal que se quede en casa. Mi madre no había trabajado desde que yo nací. Es normal que ahora ande con tantos dolores de cabeza en la cena. No debe ser sano levantarse tan temprano…

El propósito para mañana es tratar de ser más amable. Tal vez todo se solucione con una sonrisa.

Buenas noches.

Guiño de ojo.

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