Segunda parte. La polla en la que nunca debí fijarme Por suerte no había dejado que mi enamoramiento fugaz e infantil por Víctor me obsesionara en el instituto. <<Salvo en el “incidente”. No obvies ese momento, que fuiste muy patética.>> Terminé el instituto, Víctor se alejó de casa para disfrutar del verano y todo quedó en eso, …
Primera parte. La polla que vivía en mi casa Odiaba los viernes. ¿A quién no le pasa? Los fines de semana se hacían largos y tediosos en mi casa. Debía de ser la única chica en el primer curso de mi facultad —o de cualquiera de ellas, ya puestos— que no deseaba que llegara el viernes. Al …
Sonó nuevamente el despertador. Hacía sólo cinco minutos que lo había apagado, pero imagino que no debí hacerlo muy bien porque volví a escucharlo con la insistencia de hacía un rato. O, tal vez, me había equivocado al presionar la función “Snooze” en vez de la que desconectaba la alarma hasta el día siguiente. Fuera como fuere me irritó lo …
