Mientras escribía este libro he tenido un par de momentos en los que una melodía me asaltaba, como si fuera la banda sonora de ese momento en concreto al que ponía las palabras. Hubo veces que era casi imprescindible que sonara algo de música en la escena, pero otras, simplemente, la canción aparecía en mi cabeza.
¿Te ha pasado alguna vez que una situación te recuerde a una canción? Seguro que sí.
Yo escucho muy poca música en mi día a día, básicamente porque no tengo tiempo. Cuando conduzco pongo la radio, y aunque siempre tengo el CD de una recopilación de Sabina a mano, suelo dejar que el DJ me lleve a los lugares a los que quiere conducirme.
A Sabina lo reservo para mis relatos de Cartas de mi Puta.
En esta ocasión, uno de los capítulos pedía a gritos una melodía sensual envolviendo el ambiente, y ese tema lo puso The Weeknd con Often. No me preguntes por qué sabía que sería lo que iba a bailar Olivia. Simplemente, cuando sus caderas se movieron era esa canción la que sonaba.
Así de asombroso es escribir un libro. Normalmente no sé a dónde me va a querer llevar un personaje, porque cada uno tiene libre albedrío hasta que me sacan mucho de mis casillas. Y son ellos los que eligen dónde pasan las cosas y ponen la canción en el equipo de música.
Cuando Olivia separó las piernas, y comenzó con su lento movimiento de caderas fue ella misma la que me dijo lo que quería bailar. Ellos eligen. Si no… no sería tan real en tu cabeza, ni en la mía.
Estos son algunos de los temas que te vas a encontrar en La Otra. No te voy a desvelar dónde encontrarás cada uno. Tampoco te hace falta saberlo. Simplemente, cuando estés leyendo el libro, espero que la canción resuene en tu cabeza como hizo en la mía, o en la de Olivia, Octavio u Oziel.
Que lo disfrutes…
– The Weeknd. Often
– Taylor Swift. Shake it off
– Magic! Rude